La legislatura de la Ciudad de Buenos Aires, dictaminó el 29 de Septiembre del 2006 la prohibición de fumar en espacios cerrados con acceso a gente, con una superficie menor a los 100 metros cuadrados. Esto incluye restaurants y bares. Esta norma impulsada para “cuidar la salud de los no fumadores” prevee sanciones graves para los dueños de los lugares donde se encuentre gente fumando. Sancionada en el 2006 no previó que en el 2008, tan sólo 2 años después, la Ciudad de Buenos Aires, iba a estar completamente cubierta de humo, no sólo en el ambiente, sino en los ambientes de mi casa y de la de todos.
La imprevisión y la falta de visión de futuro de los políticos locales ha generado de manera contradictoria un boom de la construcción. Los últimos datos brindados por el INDEC estipulan que el crecimiento de la construcción en los últimos días ha superado un 200%, dato que parece difícil de retocar incluso para nuestro gran amigo, artista, dibujante y cuenta cuentos, Secretario de Comercio de la Nación, Moreno.
Parece ser, y como una primera aproximación algo azarosa, que la voluntad de mantenerse dentro de la ley ha hecho que miles de personas de la ciudad de Buenos Aires comiencen a construir dentro de sus propias casas lugares exclusivos para no fumadores. Miles de ciudadanos cultos y civilizados en un ataque de legalidad salen a las grandes ferreterías y a los grandes hipermercados en busca de la salvación de sus almas. Los equipos extractores, los vidrios de Blindex y las paredes reforzadas son los adminículos más solicitados, incluso debido a la demanda, un cargamento cargado de estos materiales salió ayer del puerto de Vladivostok en Rusia.
Ante estos sucesos de paranoia colectiva, el Estado comandado (no es casual la utilización de un término MILITARESCO) por nuestro gran amigo Mauricio Macri, a actuado de manera enérgica, entusiasta y valerosa. A través del decreto de Necesidad de Urgencia número 309/08 designó la contratación de 2300 inspectores que serán los encargados de hacer valer la Ley aplicando las multas estipuladas. Hasta el día de hoy se habían colocado 84.356 multas que sumaban un monto total de 523 millones de pesos, cifra más que suficiente como para construir las líneas de subte prometidas por nuestro gracioso ingeniero.
Muchos no fumadores, también tuvieron que construir lugares sin humo dentro de sus propias casas para poder afrontar con mayor solvencia este raíd humístico. Particular es el caso de Jorge Argañaraz de Estriparti, del Barrio de Parque Patrcios, que luego de discutir acaloradamente con un inspector sobre su condición de no fumador decidió tomar la situación poR sus propias manos y luego de atarlo a una silla y de colocarle 20 cigarrillos prendidos en la boca, lo obligó a que los fumase. Antes de terminar semejante acto, ingresó la policía advertida por una vecina que estaba escuchando detrás de la puerta y fue detenido.
La imprevisión y la falta de visión de futuro de los políticos locales ha generado de manera contradictoria un boom de la construcción. Los últimos datos brindados por el INDEC estipulan que el crecimiento de la construcción en los últimos días ha superado un 200%, dato que parece difícil de retocar incluso para nuestro gran amigo, artista, dibujante y cuenta cuentos, Secretario de Comercio de la Nación, Moreno.
Parece ser, y como una primera aproximación algo azarosa, que la voluntad de mantenerse dentro de la ley ha hecho que miles de personas de la ciudad de Buenos Aires comiencen a construir dentro de sus propias casas lugares exclusivos para no fumadores. Miles de ciudadanos cultos y civilizados en un ataque de legalidad salen a las grandes ferreterías y a los grandes hipermercados en busca de la salvación de sus almas. Los equipos extractores, los vidrios de Blindex y las paredes reforzadas son los adminículos más solicitados, incluso debido a la demanda, un cargamento cargado de estos materiales salió ayer del puerto de Vladivostok en Rusia.
Ante estos sucesos de paranoia colectiva, el Estado comandado (no es casual la utilización de un término MILITARESCO) por nuestro gran amigo Mauricio Macri, a actuado de manera enérgica, entusiasta y valerosa. A través del decreto de Necesidad de Urgencia número 309/08 designó la contratación de 2300 inspectores que serán los encargados de hacer valer la Ley aplicando las multas estipuladas. Hasta el día de hoy se habían colocado 84.356 multas que sumaban un monto total de 523 millones de pesos, cifra más que suficiente como para construir las líneas de subte prometidas por nuestro gracioso ingeniero.
Muchos no fumadores, también tuvieron que construir lugares sin humo dentro de sus propias casas para poder afrontar con mayor solvencia este raíd humístico. Particular es el caso de Jorge Argañaraz de Estriparti, del Barrio de Parque Patrcios, que luego de discutir acaloradamente con un inspector sobre su condición de no fumador decidió tomar la situación poR sus propias manos y luego de atarlo a una silla y de colocarle 20 cigarrillos prendidos en la boca, lo obligó a que los fumase. Antes de terminar semejante acto, ingresó la policía advertida por una vecina que estaba escuchando detrás de la puerta y fue detenido.
Aún no se sabe cuál será el fin de esta historia, pero lo que es seguro que los únicos que pedieron de todo esto, es ese ejército invisible de vende humos que han perdido (te robé el chiste pepe... una de las tantas que me debes) sus fuentes de trabajo. Una lástima para ellos, tendrán que conseguir otras mentiras que vender.
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